Junto con la emergencia climática, la pérdida de biodiversidad es uno de los grandes temas preocupantes de nuestro tiempo. La evolución de la vida avanza hacia una mayor diversidad y complejidad. Sabemos, por ejemplo, que aumentar la diversidad de especies de plantas contribuye a aumentar la resistencia de los ecosistemas. ¿Cómo podemos nosotros, como humanidad y como empresa, contribuir a garantizar que nuestra biodiversidad siga floreciendo?

Las estimaciones actuales son que de todos los mamíferos sobre la faz de la Tierra, solo el 4% representan todas las diferentes especies de mamíferos salvajes, el 36% son humanos y el 60% animales domésticos, principalmente ganado. Cuando se trata de aves, el 70% son aves de corral y solo el 30% son aves silvestres libres. Cuando se trata de agricultura, 9 especies de plantas contribuyen al 66% de toda la producción de cultivos.

Somos una empresa de cosmética y utilizamos muchas materias primas naturales, por lo que nuestro negocio se basa en crear una comunidad que pueda tener una vida próspera. Influimos en la biodiversidad al elegir que ingredientes usamos en nuestros productos, cómo se cultivan y obtienen, cuántos desechos y contaminación genera nuestro negocio y cuál es nuestra contribución a factores más grandes como el cambio climático y la degradación de la tierra. Nuestro compromiso a largo plazo es garantizar que nuestro negocio contribuya positivamente a una vida abundante, diversa y exuberante en el planeta. Esto es más complicado de conseguir de lo que parece, y difícil de medir.

Comienza por comprender mejor las presiones sobre los hábitats naturales en nuestra cadena de suministro, trabajando para reducir esas presiones, mientras continuamos desarrollando y apoyando proyectos que demuestran claramente que el suministro de materias primas y la biodiversidad pueden ir de la mano. La efectividad de nuestros productos también se basa en formulaciones cuidadosas que utilizan más de 800 materias primas naturales diferentes, aceites esenciales y sintéticos seguros de muchas especies diferentes, lo que se suma a una creciente riqueza y variedad en nuestra cadena de suministro.

Un mensaje de Helen Ambrosen, cofundadora e inventora de productos de Lush

Durante toda nuestra carrera (que se extiende por casi 45 años) en la formulación de nuestros productos, hemos buscado resolver los problemas ambientales que pueden surgir de su abastecimiento, fabricación, venta al por menor y uso. Para que nuestros clientes puedan disfrutar de sus productos Lush sabiendo que han sido inventados, pensando y cuidando el medio ambiente.

Estamos trabajando, siempre, para mejorar el impacto ambiental de nuestros productos y esto significa que tenemos que tener en cuenta varios temas al mismo tiempo. Los productos desnudos, sin plástico, autoconservantes y sin palma son aspectos que estamos desarrollando y logrando. Pero debemos recordar que nuestros clientes esperan productos útiles, que funcionen bien para ellos. No importa cuán “ecológico” sea un producto: si no funciona para el cliente, no lo volverá a comprar. Esperan conseguir un resultado beneficioso y trabajamos para proporcionárselo.

Llevamos muchos años trabajando en formulaciones de productos sin palma. Muchos de nuestros productos no contienen palma, pero en este momento no estamos en condiciones de declarar que todas las gamas de productos no contienen palma. No utilizamos aceite de palma o palmiste como ingrediente. Pero, algunos de los ingredientes que compramos para usar en nuestros productos, como las bases de champú, no son libres de palma y se pueden mezclar con otros aceites como el coco. Los ingredientes base de estas mezclas no se pueden garantizar. Así que ningún tipo de aceite de palma es la única garantía. No podemos confiar en que las fuentes de palma sostenibles sean lo suficientemente rastreables.

Hemos analizado los ingredientes a base de palma que compramos y considerado si podríamos fabricarlos nosotros mismos. Por ejemplo, revisamos las bases de champú (el volumen más grande usado de aceite de palma y derivados) para ver si podemos hacer nuestra propia base libre de palma como hacemos con nuestros jabones. Las bases de champú provienen de las mismas fuentes y la química y el proceso de elaboración son similares, aunque difieren en algunos pasos respecto a la fabricación del jabón. Algunos de estos pasos involucran ácidos en ebullición y temperaturas increíblemente altas y no tenemos la capacidad para hacer eso.

Por lo tanto, todo se reduce a la formulación con ingredientes que podemos obtener, considerando nuestra política en contra de las pruebas con animales y nuestra propia innovación e invención. Necesitamos que los fabricantes y proveedores trabajen con nosotros en esto, pero no siempre es posible.

Aunque Lush es una empresa bastante grande, todavía es pequeña a escala global y nuestro poder adquisitivo no siempre es lo suficientemente poderoso. Pero algunos fabricantes están dispuestos a trabajar con nosotros y realmente apreciamos su apoyo. Esto puede conducir al desarrollo de nuevos ingredientes para ellos, por ejemplo, copos de jabón, que no son de origen animal ni de palma, que pueden vender a otras fuentes.

Hemos hecho un buen progreso en las bases de champú y esta es el área más grande en la que la palma todavía está presente entre los ingredientes base que usamos.  Actualmente, estamos buscando emulsiones para nuestras cremas.

Esto requiere un trabajo cuidadoso, ya que estos productos cuidan con éxito la piel sensible y delicada y son los favoritos de por vida de muchos de nuestros clientes. Tenemos que hacer esto bien.

Lush está progresando en muchos aspectos ambientales, pero hay trabajo por hacer para resolver los problemas ambientales como la producción de palma que son tan perjudiciales para nuestro planeta. Los cambios que podemos hacer tienen que permitir ofrecer los productos que nuestros clientes conocen y aman, pero con el conocimiento y la transparencia para asegurarles que pueden utilizar sus productos con el menor impacto ambiental posible.

Nuestro objetivo

En el centro de nuestra estrategia de compra se encuentra el impulso constante para reducir los impactos negativos de nuestra cadena de suministro y mejorar los positivos. Al analizar nuestros ingredientes para comprender cómo contribuyen a los problemas globales, podemos trabajar de manera proactiva para mejorar la cadena de suministro.

La deforestación es una de las principales causas del cambio climático. La principal causa de deforestación es la agricultura a través de la extracción de madera para muebles y papel, la ganadería y el cultivo de soja y palma aceitera. Para asegurarnos de que no estamos contribuyendo a este problema, debemos investigar nuestra cadena de suministro en busca de indicadores de riesgo; tal indicador es el uso de aceite de palma.

Desde 2006, Lush ha estado trabajando para eliminar el aceite de palma y el aceite de palmiste de la cadena de suministro. Se han logrado avances y estamos obteniendo ingredientes derivados de una variedad mucho mayor de materias primas de aceite. Esto nos ha permitido producir una gran cantidad de productos completamente libres de palma.

Este informe explora los cambios que se han realizado y brinda una descripción general amplia del debate sobre la palma, comparando los impactos de cada una de las materias primas de aceite vegetal (palma, oliva, coco, colza) para que podamos comprender mejor el impacto de estos cambios.

¿Qué es el aceite de palma?

El aceite de palma es, con diferencia, la fuente de aceite vegetal más importante del mundo. El aceite se deriva de los frutos de la palma Elaeis Guineensis. Cada fruto consta de un grano duro dentro de una cáscara (endocarpio) que a su vez está rodeado por un mesocarpio carnoso. De la fruta se pueden obtener dos aceites químicamente distintos. El primero es lo que conocemos como aceite de palma y se deriva del mesocarpio carnoso, el segundo es el aceite de palmiste que proviene del interior de la semilla. Estos aceites son increíblemente versátiles con una amplia gama de usos; El 71% del aceite de palma se utiliza en la industria de alimentos y bebidas, el 24% en cosméticos, el 5% restante para biocombustibles, alimentación animal y mucho más.

La palma aceitera se originó en la región de la selva tropical de África occidental. Como árbol ornamental, fue llevado por todo el mundo hasta llegar al sudeste asiático, donde creció, convirtiéndose en la mayor producción comercial de un cultivo muy alejado de su origen. Ahora el 85% del aceite de Palma se produce en Indonesia y Malasia, otros 42 países producen el 15% restante. El siguiente gráfico muestra el crecimiento increíblemente rápido de la producción mundial de palma.

El aceite de palma es solo uno de los muchos aceites vegetales producidos a nivel mundial; la demanda de estos es enorme y seguirá creciendo. Entre 2018 y 2019, se produjeron aproximadamente 203 millones de toneladas métricas a nivel mundial, y se espera que alcance los 307 millones de toneladas métricas para 2050.

La Industria Oleoquímica

Los aceites vegetales tienen muchos usos en cosmética; en su forma sin procesar proporcionan textura e hidratación, pero lo que es más importante, son la materia prima de muchos ingredientes cosméticos. Los aceites se pueden descomponer en sus componentes individuales, como glicerol, ácidos grasos y alcoholes grasos. Estos derivados se utilizan luego en productos por sus propiedades emolientes o espumantes. El procesamiento industrial de derivados involucra una amplia gama de partes interesadas que conducen a cadenas de suministro largas y ramificadas, mucho más complejas que las relacionadas con el petróleo sin procesar. Esta complejidad se debe a que entre las plantaciones y los ingredientes utilizados en los productos, existen muchas transformaciones e intermediarios: molineros, trituradores, refinadores, fraccionadores, comercializadores y fabricantes de oleoquímicos.

Sobre el papel, la palma aceitera parece ser el cultivo perfecto: una larga vida económica, alto rendimiento y produce dos aceites nutritivos y muy versátiles. Sin embargo, la palma requiere altas tasas de lluvia entre 1600 mm y 5000 mm y altas temperaturas, lo que ha limitado su área de distribución a algunas de las regiones con mayor biodiversidad del planeta. Como resultado de su expansión en estas áreas, ha sido un importante impulsor de la deforestación y la creación de turberas. La destrucción de los bosques tropicales y las turberas, a menudo mediante el uso de fuego, contribuyen en gran medida al cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la erosión del suelo, la contaminación del agua y las especies invasoras; así como abusos a los derechos humanos.

Amenazas del aceite de palma:

Principal amenaza para 193 especies en peligro crítico, en peligro y vulnerables en la lista roja de la UICN. La expansión podría afectar al 54 % de todos los mamíferos amenazados y al 64 % de todas las aves amenazadas a nivel mundial. El 50% de toda la deforestación en la isla de Borneo entre 2005 y 2015 fue impulsada por el desarrollo de la palma aceitera. Entre 72.000 y 200.000 niños apátridas trabajan en las plantaciones de aceite de palma de Malasia. Las concesiones comerciales de palma aceitera cubren el 59% de los bosques comunitarios, estén legalmente reconocidos o no.

¿Puede haber palma sustentable?

Si bien los impactos ambientales son asombrosos, las organizaciones conservacionistas más grandes del mundo, WWF y la UICN, argumentan que dejar de usar aceite de Palma simplemente extenderá los impactos sobre un área más grande de la tierra, ya que los rendimientos de aceite son mucho más bajos para otros cultivos oleaginosos. En cambio, argumentan que la industria debe exigir el cultivo sostenible de palma, siendo el único organismo de certificación reconocido la RSPO. Sin embargo, solo el 19% de todo el aceite de palma producido proviene de fuentes certificadas.

La RSPO se creó en 2004 como reacción al mayor escrutinio del sector de la palma; se ha convertido en el esquema de certificación voluntaria de aceite de palma más utilizado en el mundo. El objetivo final es hacer de la producción sostenible la norma, garantizando que las operaciones y la gestión legal son económicamente viables, ambientalmente apropiadas y socialmente beneficiosas. Esto se logra a través de la aplicación del siguiente conjunto de objetivos y principios, junto con los Indicadores y Guías que lo acompañan.

Si bien la RSPO representa una fuerza importante en la industria de la palma aceitera, no deja de recibir críticas. El segundo informe de la Agencia de Investigación Ambiental sobre la RSPO dijo que se trataba de un “lavado de imagen” al dar falsa credibilidad ambiental a los productos certificados. Argumentan que la norma no se aplica lo suficiente y que hay auditorías fraudulentas de las plantaciones, que los bosques primarios todavía se talan y los derechos comunitarios de la tierra aún se violan. Muchas otras ONG se hacen eco de estas críticas.

Además, existe una falta de compromiso por parte de los productores para producir palma certificada, lo cual es claro si se considera el número de productores y los volúmenes comparativamente bajos de aceite de palma certificado. Además, actualmente no existe ningún requisito para los miembros que no son productores, como los fabricantes de bienes de consumo, los procesadores/comerciantes y los minoristas, para que tengan que comprar aceite de palma certificado. Está claro que, si bien la RSPO tiene ambiciones audaces, la implementación del estándar no las alcanza; creando una fachada sobre la industria.

En el norte de Sumatra, la biodiversidad está regresando a un área diezmada de un bosque del Patrimonio Mundial. El Parque Nacional Gunung Leuser del Ecosistema Leuser es reconocido como una de las áreas forestales más importantes del mundo, pero está amenazado por las plantaciones de palma, la tala ilegal y la caza. Desde 2017, unas 100 hectáreas de plantaciones de palma aceitera directamente adyacentes al parque se han transformado como resultado de dos campañas del grupo de conservación de Sumatra, el Centro de Información de Orangutanes y la Sociedad de Orangutanes de Sumatra, con el apoyo de Lush.

Financiado por primera vez en 2008, desde entonces nuestros clientes han ayudado a restaurar 460 ha de antiguas plantaciones de palma en bosques nativos, favoreciendo la agrosilvicultura. El equipo de OIC plantó 1100 árboles por hectárea con una mezcla de 20 especies. ¡Son 506.000 árboles plantados! Las ventas de 14.600 jabones de orangutanes (la cantidad de orangutanes que quedan en la naturaleza) recaudaron £126.014. En 2018 se reactivó la campaña para comprar y reforestar otro terreno de 50 hectáreas.

Lush no compra aceite de palma o aceite de palmiste, sin embargo, sus derivados se utilizan en algunos de nuestros tensioactivos y emulsionantes. Si bien hemos podido trabajar con proveedores para obtener alternativas para algunos de estos ingredientes; para otros, la cadena de suministro increíblemente compleja significa que es casi imposible obtener el ingrediente exacto sin palma. Esto se debe a que la industria de los surfactantes se basa en el uso de la palma; y de forma similar a la industria petroquímica, los procesos solo se vuelven económicos en escalas masivas; por lo tanto, los fabricantes más pequeños que podrían querer producir los mismos ingredientes sin palma no pueden hacerlo; por lo tanto, todo se reduce a la reformulación y reestructuración completas de nuestros productos.

A continuación se muestra una tabla de todos los materiales derivados de la palma y sus usos.

¿Cuáles son los últimos cambios?

Al trabajar con los proveedores para diversificar las materias primas utilizadas en nuestros sintéticos, ejerceremos menos presión sobre un ecosistema y reduciremos el riesgo general de deforestación y degradación de la tierra. Además, esperamos obtener más trazabilidad y más control sobre los tipos de aceites empleados y cómo se han cultivado. Ha sido un viaje largo y complicado.

Los últimos desarrollos hacen que los productos que lanzamos contengan una gran diversidad de materias primas, sin incluir la palma. Esta es la forma de comprobar si a nuestros clientes les gusta la sensación de los productos que contienen nuevos ingredientes. Los estamos poniendo a prueba.

Diversificación de nuestro Jabón

Los primeros intentos de eliminar el aceite de palma de los productos comenzaron con un cambio de nuestra base de jabón a una fórmula sin palma. Esto implicó hacer nuestras propias bases para probar en productos y luego llevar nuestra solicitud de una base sin palma a los fabricantes externos de bases de jabón.

La formulación original era una mezcla de aceite de colza hidrogenado, aceite de girasol y grasa de coco. Pero esto fue reemplazado por la base de otro fabricante que se desarrolló un poco más tarde y se hizo con aceite de colza hidrogenado y grasa de coco. La base de jabón sin palma se hizo realidad en 2007.

Desde entonces, también hemos eliminado el laurilsulfato de sodio y el estearato de sodio (o los hemos sustituido por estearato de sodio PF) de casi todos nuestros jabones. La gama de jabones estuvo completamente libre de palma por un corto tiempo, pero recientemente tuvimos que agregar el SLS nuevamente a Fresh Farmacy para estabilizar el producto.

También presentamos una serie de bases de jabón internas hechas con 13 aceites diferentes y apoyamos directamente a miles de agricultores en 6 cooperativas de productores. La eliminación del aceite de palma ha beneficiado a la gama de jabones al introducir una mayor variedad de materiales, texturas y efectos en los productos finales. Ahora hay una colección de bases que podemos mezclar y combinar en lugar de depender de la misma base para cada jabón.

¿Cuál es el siguiente paso para Lush?

Al necesitar distintos ingredientes y materiales para poder realizar nuestros productos, Lush depende de los distribuidores y fabricantes para poder obtenerlos. Estamos, por tanto, alejados del cultivo primario de la palma y de los principales impactos negativos. Dado que la mayoría de los fabricantes compran aceites procesados, ácidos grasos y aminas para producir tensioactivos, también se pierde el rastro de la fuente principal de aceite. Para asegurarnos de que no estamos apoyando la deforestación, es esencial que desarrollemos transparencia y trazabilidad a lo largo de la cadena de suministro trabajando con nuestros proveedores. Esto ha sido parte de nuestra estrategia de compra desde el principio; sin embargo, en 2018 y 2019 tomamos medidas significativas para mejorar nuestras posibilidades de éxito.

El futuro

Mientras continuamos buscando nuevos materiales alternativos que podamos emplear, a medida que se inventa y fabrican, hemos decidido avanzar hacia el desarrollo de una solución más amplia para dar forma a toda la industria que rodea a los sintéticos derivados de la palma. Esta es la única forma real en que Lush podrá eliminar su uso por completo.

Creemos que tenemos las claves de la solución, pero necesitaremos la colaboración de otras empresas y la inversión para proporcionar una gama de productos sintéticos sin palma que puedan funcionar en nuestros productos y que no se prueban en animales. Pensamos que aquí es donde podemos hacer un cambio global real para prevenir una mayor deforestación.

Desafíos Para crear el cambio que se necesita, tenemos que superar algunos grandes desafíos:

• Las cantidades mínimas disponibles para la síntesis suelen ser mucho mayor que nuestro uso anual, por lo tanto, necesitaríamos encontrar otros usuarios para utilizar el lote completo.
• La aplicación de la cadena completa de carbono (C8-C18); para muchos de nuestros surfactantes solo necesitamos una pequeña cantidad de fracciones, sin embargo, el proceso produce muchas más de las que no necesitamos.
• La complejidad para encontrar proveedores con capacidad para probar nuevos materiales y poder firmar la Política en contra del testado con animales.
• La etoxilación del aceite base, es un proceso químico utilizado en la industria para crear tensioactivos y está controlado por algunas de las empresas más grandes del planeta, esto dificulta la creación de una cadena de suministro que no dependa de estos negocios poco transparentes.

Soluciones

Para superarlos, debemos formar un grupo más grande de empresas con el propósito compartido de desarrollar los volúmenes adecuados de ingredientes que no contribuyan a la deforestación y la pérdida de biodiversidad.