Creemos que las prácticas éticas deberían ser lo normal

En Lush nunca nos ha gustado decir que somos una empresa ética. Consideramos que el término es un concepto bastante difícil, porque nos parece que se utiliza para describir a los negocios que intentan no dañar a las personas o al planeta con sus prácticas comerciales, cuando eso no debería ser algo ético, sino lo normal.

Todos los negocios deberían ser éticos y todo el comercio debería ser justo. Las empresas no deberían destacar simplemente por no ser perjudiciales o injustas. Ninguna empresa debería comerciar desde una posición poco ética y la sociedad tiene derecho a esperar, como norma, la equidad y la administración responsable de los recursos.

Siempre hemos querido que todas las personas involucradas con Lush vean sus vidas enriquecidas y se beneficien de su contacto con la empresas: desde el personal hasta aquellas que compran nuestros productos o nos proveen de nuestros preciados ingredientes.

Aunque ninguna empresa es perfecta, nos esforzamos diariamente por acercarnos a la visión ideal que todos los integrantes de Lush comparten. Nuestros estándares siempre serán altos y nos exigiremos más para que nuestras prácticas empresariales estén a la altura de nuestras propias expectativas, las de nuestro personal y clientes, y además cumplan con  las necesidades del planeta.

Consulta nuestras posiciones y políticas aquí.

Estas políticas evolucionan continuamente a medida ya que responden a los acontecimientos mundiales, a la nueva legislación y a nuestras propias aspiraciones de mejorar constantemente. Cuando Lush tiene socios en otras partes del mundo, les animamos a adoptar políticas similares.